Castilla-La Mancha retoma actividad exterior en Amsterdam y Praga.
Diecinueve bodegas castellomanchegas han participado en una misión comercial en Praga que antes recaló en Amsterdam y con la que el Instituto de Promoción Exterior de Castilla-La Mancha (IPEX) reanuda su actividad tras el parón por la pandemia de la covid.
La República Checa es un importante consumidor de los vinos castellomanchegos. De todo el vino embotellado de España que importa el país centroeueropeo, el 54 % proviene de Castilla-La Mancha, donde la exportación de estos productos totalizó los 240 millones de euros en 2021, un 4 % más que en el año anterior, según los datos del IPEX.
«Se trata de una cifra récord desde que se tienen registros de exportación en el región y ha sido superada con los datos que tenemos hasta febrero», destacó Noé.
Se trata del tercer encuentro presencial con importadores de vino en Países Bajos y primero en Chequia dentro del programa de promoción itinerante que se está realizando en los principales mercados de la Unión Europea y que, además de estos países, ha contado desde 2015 con eventos en Bélgica, Dinamarca, Polonia, Austria y Alemania.
El principal objetivo de esta acción es dar a conocer la gran diversidad de oferta de vinos de Castilla-La Mancha, unida al excelente nivel de calidad ofrecido por las bodegas de la región. En 2021 las ventas de vino embotellado por Castilla-La Mancha superaron los 240 millones de euros, con un incremento del 4% respecto al año anterior. La región exportó sus vinos a un total de 142 mercados a nivel mundial.
El IPEX, con un presupuesto de promoción en 2022 de 4,5 millones de euros, lo que supone un aumento del 8 % respecto a 2021, apoya a las bodegas de la región con ayudas directas, de 8.000 euros por empresa y año, así como con ayudas agrupadas (ferias y muestras colectivas).
«Las ayudas directas en concepto de ‘cheque exportador’ para promoción, sostenibilidad y digitalización les ayuda en su posicionamiento internacional», afirmó Noé. EFE
