Francisco Martínez-Arroyo, presidente de la FTV de Castilla-La Mancha, hace un balance positivo de este 2022.
El programa de catas de vino de esta Fundación ha llevado a cabo 20 eventos didácticos y gratuitos, con gran éxito de participación, en un año en el que se han doblado las cifras de asistentes, al superarse los 1.600.
Además, la Fundación ha tenido un stand propio en la Feria Nacional del Vino (FENAVIN), ofreciendo un programa de compradores a nivel internacional y presentando los vinos de la región a más de cien importadores en la jornada Castilla-La Mancha Welcome Event, junto con diversas catas para visitantes.
La Fundación, junto con Campo y Alma y la Asociación Eurotoques, con la intención de promocionar los vinos de calidad, también han desarrollado un programa para la hostelería. En él se han involucrado más de 200 profesionales y 50 bodegas, interesados por la inclusión de los vinos castellano manchegos en las cartas de sus establecimientos. Esto se complementa con un programa para las escuelas de hostelería, en el que han participado 125 alumnos.
El plan para 2023
Según el consejero regional, los objetivos establecidos para este año se han cumplido, reduciendo el déficit, por lo que el optimismo acompaña la venida de 2023. Así lo demuestran los 425.000€ de presupuesto, cifra ligeramente superior a la de 2022. De ellos, un total de 260.000€ provienen del gobierno regional y 150.000€, de la Organización Interprofesional del Vino de España.
De cara al nuevo año, las metas que se plantea la Fundación estarán centradas en difundir la importancia del patrimonio vitivinícola a todos los niveles -social, económica y medioambiental-, para garantizar la estabilidad de las zonas rurales.
Así mismo, se mantienen tanto el programa de catas didácticas como los de formación para la hostelería -el de profesionales y el de las escuelas-.
Después del éxito cosechado en la última edición de FENAVIN, los ojos también están puestos en la siguiente feria, que tendrá lugar un año más en Ciudad Real en el mes de mayo.
Según ha afirmado Martínez-Arroyo, todo esto tiene como único fin “que se siga apostando por el fomento de la cultura del vino en Castilla-La Mancha”.
Ayudas a la reestructuración de viñedo
Este viernes 23, un total de 258 viticultores se van a ver beneficiados por la reestructuración del cultivo de vid en la región. Así lo afirma el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez-Arroyo, cuyo gobierno va a entregarles 2,6 millones de euros por su compromiso “con la reestructuración del viñedo y la apuesta por nuevas variedades o por variedades que ya teníamos, orientadas de manera distinta”.
La extensión total involucrada es de 852 hectáreas y, en concreto, el reparto de la subvención va a ser el siguiente: en la provincia de Albacete, 74 viticultores recibirán 570.558; 73 viticultores de Ciudad Real, 1.089.601€; 596.046€, para 87 de Cuenca; y 270.896€, para 24 de Toledo.
Además, la airén de secano que tenga más de 50 años, por ser la variedad más autóctona de la zona, por su sostenibilidad y por su impacto en el ahorro de agua -debido a las medidas de limitación del rendimiento y del grado de la uva-, va a recibir una ayuda extra.
El sector del vino cuenta con 460.000 hectáreas y 80.000 viticultores, que aportan un 5% al PIB de la región, convirtiéndola en el mayor viñedo del mundo y en la principal bodega, puesto que involucra a 500 empresas y cooperativas. Todo ello tiene como resultado nueve denominaciones de origen protegidas, una Indicación Geográfica Protegida y doce pagos de vino.
