Acuerdan una serie de recomendaciones políticas destinadas a definir el futuro del sector vitivinícola en Europa.
Ayer tuvo lugar la cuarta y última reunión del Grupo de Alto Nivel de la Unión Europea sobre el sector del vino. Durante el encuentro, la Comisión Europea y los Estados miembros acordaron una serie de recomendaciones políticas destinadas a definir el futuro del sector vitivinícola en la UE. La reunión contó con la participación del nuevo Comisario de Agricultura y Alimentación, Christophe Hansen.
Mauricio González-Gordon, presidente del Comité Européen des Entreprises Vins (CEEV), expresó optimismo sobre el resultado: “Acogimos con satisfacción la creación de este Grupo de Alto Nivel sobre el vino, una iniciativa encomiable de la Comisión, para abordar los desafíos críticos que enfrentamos y proponer las soluciones necesarias. El declive estructural del consumo de vino sigue siendo el cuello de botella de nuestros problemas y las políticas futuras deben centrarse en los mercados del vino y las expectativas de los consumidores. Si bien la regulación de la UE no puede abordar todos los desafíos, puede crear el marco para que el sector vitivinícola navegue con éxito en estos tiempos difíciles”.
El CEEV subrayó los tres principios fundamentales incluidos en las recomendaciones: competitividad, sostenibilidad y resiliencia. El apoyo de la UE debe priorizar a los operadores que inviertan en el sector, debe promover la innovación y no centrarse en medidas destructivas. Esto es fundamental para fomentar una industria vitivinícola vibrante y sostenible.
La CEEV reconoció la inclusión de varias de sus propuestas clave en las recomendaciones adoptadas, entre ellas:
- Prolongar la validez de las autorizaciones de replantación, explorar estrategias para gestionar el exceso de rendimiento, promoviendo al mismo tiempo la cosecha en verde y limitando el uso de esquemas de arranque;
- Una mayor flexibilidad en la gestión financiera de los programas sectoriales del vino;
- Mantener una sólida estrategia de exportación de la UE y reforzar los programas de promoción;
- Reforzar las medidas de adaptación al cambio climático;
- Establecer nuevas normas para los vinos desalcoholizados y parcialmente desalcoholizados, así como para el enoturismo y la venta a distancia;
- Desarrollar urgentemente un sistema de etiquetado electrónico armonizado y más completo, que debería basarse en un sistema de identificación del código QR en la etiqueta sin idioma.
Durante la reunión, Ignacio Sánchez Recarte, Secretario General de la CEEV, destacó una preocupación singular con las recomendaciones propuestas: «Debemos mantener un terreno de juego equitativo y, por lo tanto, no apoyaremos políticas que hagan distinciones basadas en la estructura legal, como empresas frente a cooperativas.»
“Esperamos trabajar con la Comisión para desarrollar estas recomendaciones y que se traduzcan en un marco jurídico concreto lo antes posible. Por ejemplo, el desarrollo de nuevas normas para los sistemas de etiquetado electrónico y los vinos No-Low son las prioridades inmediatas del sector”, concluyó.
Una noticia de la CEEV.
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